Juan de Ibelín
Juan de Ibelín, llamado «el viejo Señor de Beirut», fue un poderoso noble cruzado del siglo XIII, uno de los más conocidos representantes de la influyente familia Ibelín. Hijo de Balián de Ibelín y María Comnena, reina consorte de Jerusalén. Tuvo estrechos vínculos con la nobleza de Chipre y Jerusalén, ya que era el medio hermano de la reina Isabel de Jerusalén. Antes de cumplir 20 años fue nombrado condestable de Jerusalén, y unos años después se convirtió en señor de Beirut, donde reconstruyó la ciudad después de la conquista de Saladino y edificó el gran palacio de la familia Ibelín. Actuó como regente de dos de sus jóvenes parientes, la hija de Isabel María de Montferrato desde 1205 hasta 1210, y luego Enrique I de Chipre desde 1228 hasta que Enrique alcanzara la mayoría de edad en 1232. Juan fue conocido como un hombre de principios, y fue visto como el líder natural de los barones cristianos en Tierra Santa. Resistió la búsqueda de poder de Federico II, emperador del Sacro Imperio en Chipre y se opuso a las fuerzas imperiales hasta que Enrique alcanzó la mayoría de edad.